Tania Molina

Deja su huella,
afirma su paso,
la voz inconfundible
de la vida,
y aunque confusa
vibra en mi garganta
de hueso
tranquila va por esos
tubulares parajes
abriendo de para en par
ventanales de conciencia,
persevera su paciencia
para mostrar el camino
que conduce, circulando,
al universo.

He traído aquí este verso
después de jugar con ella,
la voz deja aquí su huella
y se apresta a descansar.